¿Qué pasa con los datos en la nube durante un apagón? Esto es lo que debes saber

El pasado 28 de abril, un apagón masivo dejó a oscuras gran parte de la Península Ibérica poco después del mediodía. En algunas zonas, el suministro eléctrico no se restableció hasta el día siguiente.

Medios locales reportaron que la causa fue la «desaparición súbita» de 15 gigavatios (GW) de potencia en tan solo cinco segundos. Para que te hagas una idea, esto representaba el 60% del suministro eléctrico de toda España en ese momento. Es como si de repente, una gran parte de la energía disponible simplemente se esfumara.

Red Eléctrica de España (REE), la empresa encargada de la transmisión de electricidad en el país, informó que hubo una fuerte oscilación en el flujo de potencia de las redes, acompañada de una pérdida de generación muy importante. Sin embargo, hasta ahora no se ha podido determinar con exactitud qué provocó este suceso tan inusual.

Un punto importante es que Red Eléctrica de España descartó que el apagón masivo fuera causado por un ciberataque. Esto significa que la causa es de origen técnico o natural, no por una acción malintencionada externa.

¿Qué es un centro de datos? 

Cuando un evento así ocurre, es normal preguntarse, ¿qué pasa con mis datos en la nube? O ¿si se habrá guardado la última actualización que hice en la nube?

Lo primero que debes saber es que toda la información que está en la nube se almacena en un centro de datos físicos que los proveedores tienen instalados en varios puntos del mundo, esto con la finalidad de reducir el tiempo de latencia en los servidores. 

Según AWS, un centro de datos es una ubicación física que almacena máquinas de computación y sus equipos de hardware relacionados. Contiene la infraestructura de computación que requieren los sistemas de Tecnología e Informática (TI), como servidores, unidades de almacenamiento de datos y equipos de red. 

Como se mencionó antes, es la instalación física que almacena los datos digitales de cualquier empresa.

Son importantes porque todas las empresas necesitan equipos de computación para ejecutar sus aplicaciones web, ofrecer servicios a los clientes, vender productos o ejecutar aplicaciones internas de contabilidad, recursos humanos y administración de operaciones. 

Entre las ventajas que aportan los centros de datos, según información de AWS, son: 

  • Fuentes de alimentación de reserva para administrar los cortes de energía
  • Replicación de datos en varias máquinas para la recuperación de desastres
  • Instalaciones con temperatura controlada para prolongar la vida útil de los equipos
  • Despliegue más fácil de las medidas de seguridad para cumplir con las leyes de datos

¿Qué pasa con los centros de datos en un apagón? 

Para este punto, es importante saber qué es una región de datos. 

Se trata de una instalación con muchos ordenadores que almacenan y procesan grandes cantidades de información, estos se encargan de que todos los productos y servicios de Google funcionen las 24 horas del día en todo el mundo. Cuando abres tu Gmail o realizas una búsqueda en Google, estás haciendo uso del centro de datos.

Nuestro CTO Héctor León, explica que una región de datos de Google Cloud está compuesta por mínimo tres centros de datos, esto por si uno llegara a fallar, los demás tienen la capacidad para seguir operando. 

“Ninguno de estos tres tiene un punto de falla en común, no tienen el mismo proveedor de electricidad, lo que nos garantiza que sigan operando si alguno falla”.

¿Y qué pasa con mi información en la nube en un apagón? 

A diferencia de un servidor local o tu computadora personal que se apagará de inmediato ante un corte de luz (lo que podría llevar a corrupción de datos o pérdida de trabajo no guardado), los centros de datos en la nube están diseñados para ser altamente resilientes y tolerantes a fallos. Esto es lo que sucede:

Sistemas de Alimentación Ininterrumpida (SAI/UPS): Los centros de datos están equipados con baterías gigantes (UPS) que se activan instantáneamente en el momento en que se interrumpe el suministro eléctrico principal. Estas baterías proporcionan energía limpia y constante, evitando cualquier corte brusco de corriente a los servidores y equipos.

Generadores Diésel de Gran Escala: En paralelo con los SAI, se encienden potentes generadores diésel. Estos generadores tienen la capacidad de mantener el centro de datos funcionando de forma indefinida, siempre y cuando haya combustible disponible. Se realizan pruebas y mantenimientos regulares para asegurar que estos sistemas estén siempre listos.

Redundancia de Infraestructura (N+1, 2N): No es solo que haya un generador o un sistema de baterías, sino que hay múltiples sistemas redundantes. Esto significa que si un componente falla (por ejemplo, una batería o un generador), hay otro de respaldo listo para tomar el relevo de inmediato. Los diseños más avanzados pueden ser «2N», lo que implica que tienen el doble de capacidad de la necesaria, asegurando que siempre haya un sistema completo de respaldo.

Centros de Datos Distribuidos Geográficamente: Uno de los mayores beneficios de la nube es la distribución geográfica. Los grandes proveedores de la nube no tienen un único centro de datos, sino redes de centros de datos repartidos por todo el mundo. Tus datos suelen estar replicados (copias) en al menos dos o más ubicaciones geográficas distintas, e incluso dentro de diferentes «zonas de disponibilidad» dentro de una misma región.

Si un apagón masivo afectara una región entera (como lo que pasó en la Península Ibérica), los servicios y datos podrían ser automáticamente redirigidos a otra región o zona que no esté afectada, minimizando el tiempo de inactividad.

Replicación y Copias de Seguridad (Backups): Además de la redundancia geográfica, los datos se replican activamente dentro de los propios centros de datos y se realizan copias de seguridad automáticas y frecuentes. Esto asegura que, incluso en el improbable caso de una falla a gran escala en un centro de datos, tus datos puedan ser restaurados desde una copia reciente en otra ubicación.

¿Cómo cuida mis datos la nube en un apagón?

Cuando hay un apagón de energía, los centros de datos de la nube están diseñados para:

Mantenerse operativos: Utilizan una combinación de SAI y generadores para asegurar un suministro eléctrico continuo.

Proteger tus datos: La redundancia de equipos y la replicación de datos evitan la pérdida o corrupción.

Garantizar la disponibilidad: La distribución geográfica permite que tus servicios se mantengan en línea incluso si una región entera se ve afectada por un fallo.

Por estas razones, el riesgo de perder datos o experimentar interrupciones significativas debido a un apagón es extremadamente bajo cuando utilizas servicios en la nube de proveedores confiables. La inversión en infraestructura y seguridad que realizan estas compañías es algo que pocas empresas podrían permitirse implementar por sí mismas.